Artículo 597. El otro día fui al cumpleaños de una mujer que cumplía 90 años. Es la abuela de un amigo mío. No paré hasta averiguar parte de los secretos que residen dentro de ella. Y es que siempre he creído que cumplir ciertas edades te da una sabiduría imposible de conseguir. No hay atajo posible para lograr esa inteligencia excepto cumplir años.
Me pareció muy interesante cuando me contó que el bajón de salud se nota en un instante entre los 85 y los 90. Y sobretodo, le pregunté que había aprendido en estos 90 años de vida y me contestó una cosa muy curiosa. Me dijo que… Casi os lo cuento después de lo mejor de mi semana:
3er puesto. “Cegados por el sol” escrita por Dave Kajganich y Alain Page. (Blu-Ray) Esta adaptación supera con creces a la versión original. Destila una poesía realista y dolorosa sobre las adicciones que más tarde el director depuraría en “Call me by your name”.
2º lugar. “Giselle” (Festival de Peralada) El ballet du Capitole de Touluse logró crear un cuento de hadas que dio un color único a ese espectacular decorado al aire libre.
1ª posición. “Rufus Wainwright” (Festival de Peralada) Uno de esos increíbles conciertos llenos de pasión y que destilan felicidad instantánea. Rufus disfrutó y contagió el instante mágico en el que vive a todos los presentes.
Y el consejo que me dio de estos 90 años de vida fue el siguiente: “Todas las familias tienen un hermano conflictivo. Todas, sin excepción. Tienes que comprenderlo y amarlo mientras vivan tus padres… Cuando ellos mueren, entonces el destino decidirá cual será vuestra relación. No se es hermano eternamente.”
Me entusiasmó esta dolorosa teoría sobre los hermanos y su lugar en el mundo. Sin duda, cumplir ciertos años debería ser una asignatura de obligada escucha porque las experiencias pasadas por el filtro del pasado mutan los tristes recuerdos en consejos sabios. ¡Feliz jueves!