Artículo 603. El otro día una amiga me contó una técnica que utilizan en escuelas nórdicas para niños de hasta diez años. Es una forma de educar y enseñar que conecta con sus propios traumas y temores.
Lo que hacen es que les muestran un cuadro famoso y les piden que cuenten que es lo que más les llama la atención. Es increíble porque algunos niños ven colores diferentes o se fijan en imágenes que están en segundo plano y que nosotros no les damos importancia. Ella leyó hace poco que una profesora explicó que uno de esos niños se fijaba en… Casi os lo cuento después de lo mejor de mi semana:
3er puesto. “Gran Reserva. Xou” (Tv3) Me entusiasma cada madrugada descubrir estos geniales programas antiguos y disfrutar con ese pasado que acaba asemejándose tanto a nuestro presente.
2º lugar. “Quartet Onnoven” (Festival de Música d’Estiu de Ciutadella) Interesante unión de cuatro grandes de las tubas que lograron un concierto diferente y lleno de matices que nos llevaron a otra época y a otra emoción.
1ª posición. “Better call Saul” creada por Vince Gilligan y Peter Gould. Esta cuarta temporada ya huele a Breaking Bad. Cada una de sus secuencias está realizada con mimo y buscando la bisagra perfecta para comprender la última transformación de Saul.
https://www.youtube.com/watch?v=VXbaWEJ5-cM
Y al niño lo que más le interesaba era la gente de espaldas que había en esos cuadros. La profesora decidió ir a su casa para intentar entender porque esa fijación por esos personajes y descubrió que la madre del niño trabajaba de costurera y que siempre estaba de espaldas, en dirección a las ventanas, porque era donde estaba la luz.
Curioso descubrir que aquel niño buscaba en los cuadros lo que tenía en casa y que potenciaba su propia personalidad y su gran diferencia con otros niños. Creo que eso no sólo funciona con niños, estaría genial que ver cuadros y encontrar tu mundo en ellos fuera asignatura obligatoria ¡Feliz miércoles!