Artículo 569. Me entusiasma cuando el periódico comparte dos días y es leído dos veces por la misma persona. Disfrutar de esa doble lectura es un gran placer que se produce pocos días al año.
Jamás había podido tener la oportunidad de escribir un artículo en esa bisagra entre el 31 de diciembre / 1 de enero. Es para mi una fecha importante. Dejar un año y empezar uno nuevo trae consigo deseos, promesas y cambios. Todos tenemos un par que arrastramos y un par nuevos.
Y ayer me encontré con mi vecino de 90 años que me dijo algo muy sabio que él hace en fin de año… Casi os lo cuento después de lo mejor de mi semana:
3er puesto. “Stefan Zweig: Adiós a Europa” escrita y dirigida por Maria Schrader. Excepcional retrato de los últimos meses del gran escritor aquejado por los mismos problemas del país al que ama.
2º lugar. “Boris Becker: el jugador” dirigido por Hans-Bruno Kammertöns (Netflix) Realmente excepcional la fuerza de voluntad de este campeón. La capacidad de triunfar cuando todo se complica.
1ª posición. “El sentido de un final” escrita por Nick Payne. Excelente película sobre la búsqueda de los recuerdos de juventud a través del dolor ajeno y disfrutando de ser como uno es.
Y lo que me dijo mi vecino es que cada final de año mira la lista que escribió con 23 años, es una lista donde hay todo que le importa en la vida. Y que desde esa edad ha ido aumentando porque la vida le ha aportado muchas cosas pero que en los últimos 20 ha debido comenzar a tachar muchas cosas porque las ha ido perdiendo.
Me explicó que: “En el último día del año sacó esa vieja lista. Tacho lo que he perdido este año: Algún amigo, alguna capacidad y quizás alguna tontería material e intento como mínimo añadir algo nuevo y eso me hace ver que he tenido un buen año. La vida consiste en aprender a perder lo que ganaste”.
No está nada mal su forma de ver la vida. ¡Adiós 2017 y feliz 2018!